Primer viaje en el Audi A5 y el Audi S5 Coupé

Ingolstadt vuelve a entrar con el pecho ancho en la carrera por la corona de los coupés premium y pone su propio signo de exclamación en el asunto con el reclamo de marketing #SoGehtCoupe. Hemos podido comprobarlo con la primera prueba de conducción de los nuevos Audi A5 Coupé y Audi S5 Coupé. Este último es la verdadera innovación, que también ha recibido un nuevo corazón y ahora se basa en la turboalimentación en lugar de la sobrealimentación. ¿Quieres comprar un coche de ocasión en Toledo? En el concesionario Crestanevada de coches ocasión en Toledo podrás encontrar el coche de tus sueños al mejor precio.

Audi también se reserva innovaciones con el nuevo A5 Coupé. Quienes ya conozcan el Audi A4 y su variante deportiva, el S4, no encontrarán nada nuevo en el Coupé. Sólo los faros son nuevos, con Matrix LED, por supuesto, como opción. Por lo demás, la política de precios es algo cuestionable, ya que el virtual cockpit sólo está disponible con sobreprecio, incluso en el S5 Coupé. Además, está la dirección directa opcional, que en mi opinión debería ser un requisito indispensable para el S5. Tanto el S5 como el más potente 3.0 TDI de 286 CV pueden equiparse opcionalmente con un bloqueo del diferencial trasero. Pulgares arriba por eso.

Audi ha elegido tres sistemas de propulsión diferentes. El A5 Coupé lleva de serie tracción en el eje delantero, pero quien quiera más puede elegir. Puede ser un quattro ultra llevado a la cima por la eficiencia, que corta la transmisión al eje trasero directamente detrás de la transmisión incluso antes del árbol de transmisión. O la tracción quattro permanente que en su día hizo famosa e infame a Audi. Desde el punto de vista del consumo de combustible, sin duda merece la pena considerar el quattro ultra, pero desde el punto de vista de las prestaciones, nada supera al diferencial central autoblocante. Distribuye la potencia 40/60 del eje delantero al trasero y envía hasta el 85% del par motor a la parte trasera, no sólo en el S5 Coupé.

Se dice que el nuevo 3.0 TFSI del S5 Coupé responde de forma espontánea y directa. El responsable de ello es el nuevo turbocompresor twin-scroll situado en el centro de las bancadas de cilindros. Este sustituye al sobrealimentador mecánico del predecesor, y además la innovación proporciona 21 caballos más (354 CV) y un aumento del par motor de 60 Nm hasta unos suaves 500 Newton metro. El motor del S5 merece algunas actualizaciones más para mantener su promesa, porque no importa en qué marcha, siempre hay un ligero retraso. Sólo en la gama alta de revoluciones el motor despierta a pleno rendimiento, mientras que por debajo es un poco lento durante unos instantes. A altas revoluciones, el S5 Coupé es un placer de conducir, porque la tracción quattro permanente cambia de marcha con rapidez. Un ligero empujón sobre el eje delantero es suficiente para que pase más par a la parte trasera.

En el lado inferior de la gama de motores, sin embargo, el 2.0 TDI de 190 CV (400 Nm) quizá no sea la elección adecuada para este coupé de ambición deportiva. Hace un buen trabajo de deslizamiento y adelantamiento, pero no hay verdaderas emociones. Con los motores V6, ya sean diésel o gasolina, el A5 Coupé es más emocionante.

Las dimensiones del A4 Coupé se han ampliado ligeramente en 47 milímetros hasta los 4,67 metros. Al mismo tiempo, el A5 Coupé es ocho milímetros más estrecho. En este cambio destaca la parrilla Singleframe, plana y al mismo tiempo ancha, que se integra perfectamente en la forma del capó. Que, por cierto, forma un ligero borde por encima del paso de rueda delantero. En los laterales, los retrovisores exteriores se han trasladado a las puertas y la zaga está encantada con las luces traseras LED de serie con bordes adicionales. Es dudoso que el coupé siga el mismo camino, pero en cualquier caso, ¡sí! Si no te gustan las formas elegantes y curvas, encontrarás tu coupé en el anguloso A5 Coupé de Ingolstadt.